¿POR QUÉ CONTRATAR MANTENIMIENTO DE AEROTERMIA?

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Como sabemos, una de las instalaciones más caras de nuestra vivienda es la instalación de aerotermia, y obviamente los elementos que tenga añadidos, como son el suelo radiante, los radiadores, etc. Por ello consideramos muy oportuno que estos equipos sean mantenidos por profesionales que, como veremos, a la larga nos harán ahorrar y ganar dinero.

Tengamos presente que una máquina de aerotermia es una bomba de calor, similar a la de un aparato de aire acondicionado común y corriente. En varios posts anteriores ya tratamos del mantenimiento de los equipos de ventilación y climatización y en otro, el mantenimiento de las instalaciones de ACS y energía solar térmica.

Como en el caso de los aparatos de aire acondicionado, ventiladores, compresores, rodamientos, electrónica, es susceptible de estropearse si su funcionamiento no es óptimo. Por ello vamos a hablar de los beneficios que tiene hacer un mantenimiento de nuestros equipos de aerotermia que, al cabo del año, veremos que salen gratis.

 

BENEFICIOS DE LOS MANTENIMIENTOS PREVENTIVOS DE AEROTERMIA

 

Sin excepción, todos los aparatos electrónicos o mecánicos son susceptibles de romperse en algún momento. Arreglarlos o no, dependerá de la gravedad de las averías o incluso de la disponibilidad de los recambios. Si bien es cierto que muchas personas conservan el coche, la moto o la radio de su abuelo, es raro que exista un componente emocional a la hora de arreglar una caldera de condensación o un split de aire acondicionado. Necesitamos confort en nuestro hogar y el correcto funcionamiento de los aparatos de climatización es prioritario.

Los mantenimientos preventivos y, llegado el caso correctivos, de los aparatos de aerotermia, pueden detectar a tiempo pequeños fallos, fugas o ruidos indeseados que, con el uso continuado, irán a mayores y supondrán averías de mayor importe. Por eso precisamente recomendamos al menos una visita anual en una vivienda particular para controlar este tipo de detalles que, para el dueño de la propiedad son imperceptibles, pero para nuestros técnicos, son el “pan de cada día”

Con estas visitas periódicas, los técnicos están familiarizados con las instalaciones y les resulta muy fácil prevenir averías más graves. Además, la revisión periódica de las máquinas y sus conductos, hace que los equipos consuman lo estrictamente necesario. Este detalle no es baladí, puesto que al precio que está actualmente la energía (venga de la  electricidad o del gas, cuando se trata de calderas de condensación), un sobre consumo continuado a lo largo del año, se puede traducir en unos cientos de euros al cabo de varios meses.

Vamos a mostrar esto con un pequeño ejemplo. Si tenemos presente que más de la mitad de la factura de la luz se va en la climatización de nuestro hogar, podemos asignar un 60 %. Si la máquina no está correctamente mantenida y está sucia, por ejemplo, el esfuerzo de todos los elementos para proporcionar el mismo calor, será mayor, puesto que disminuirá su rendimiento. Recordemos que una bomba de calor “necesita respirar” aire de forma fluida, para poder trabajar conforme a las especificaciones del fabricante.

Vamos a hacer una pequeña simulación, sobre la base de un gasto mensual de 150 € y una pérdida del rendimiento del 15 %, siendo complacientes: si aumentamos esas cifras, los números aumentarán proporcionalmente, y al revés.

Si la factura de la luz son unos 150 euros/mes y hemos dicho que el 60 % (90 €) de este gasto está afecto a la climatización. El 15 % de ese 60 % serán 13,5 € euros/mes. Multiplicamos esa cifra por 12 meses y nos da la bonita cifra de 162 euros¡¡. Ese dinero, literalmente, lo estamos tirando a la basura. Recordemos que un mantenimiento anual de aerotermia puede costar unos 100 € por término medio.

Por si fuera poco y para rizar un poco más el rizo, si la vida útil de un aparato de aerotermia puede ser, por término medio unos 12 años, estaremos acortando la vida útil de ese aparato. Obviamente no vamos a entrar en la pérdida económica que supone la no amortización del importe total por esa pérdida de años de vida de la máquina.

Por otro lado, la legislación vigente en su acuerdo marco que es el RITE (Reglamento de instalaciones térmicas en edificios), establece que “para una instalación de potencia útil nominal menor o igual a 70 kW, cuando no exista Manual de uso y mantenimiento, se mantendrá de acuerdo con el criterio profesional de la empresa mantenedora”.

Lo que significa que, si no realizamos esos mantenimientos de forma periódica, estaremos incumpliendo claramente unas directrices que tienen la función de salvaguardar la salud y el bienestar de nuestros seres queridos y nuestra economía. En absoluto se trata de recalcar el carácter punitivo de las leyes, más bien al contrario; el RITE nos protege a tod@s.

Recordemos siempre que el momento ideal para realizar estas labores de mantenimiento es en otoño y primavera. Esto es así ya que es justo antes de poner los equipos a pleno rendimiento, para que nos den calor en invierno y frío en verano.